* "Lo que trae problemas no es lo que no sabemos, sino lo que sabemos que no es así" (Mark Twain). Todo organigrama de una empresa, todo sistema de juego de un equipo de fútbol, se diseña para llevar a cabo la estrategia con unos objetivos definidos... Sin embargo, un gran número de organigramas y sistemas van por delante de las estrategias. Y de las personas...
* Es la ilógica de los dirigentes que primero pintan el paisaje y luego los protagonistas. Son las personas con sus capacidades las que hacen buenos los organigramas y los sistemas de juego; y no al revés...
* Como ideaba Henry Mintzberg, la solución sería el "organígrafo", como una manera de representar una panorámica fiel de la empresa, como en un mapa. Aunque en un partido de fútbol es muy dificil adivinar la fluencia de la pelota y las acciones técnicas que se producen en décimas de segundo. ¿Vds. se imaginan jugar un partido de fútbol con un organigrama jerárquico?
* Los organigramas son una mentira falaz. Las estructuras funcionales sólo son válidas para cuando hay que encontrar culpables de los malos resultados. El organigrama se ignora sistemáticamente a diario, se rompen totalmente sus principios: delegación, medios, capacidad de retribuir, capacidad de elegir el propio equipo, capacidad de rotar y promover cambios, capacidad no sólo de castigar sino de desarrollar y reconocer.
* La frase más conocida con la que se actúa es aquella de "Órdenes de arriba..." Justo en ese momento el organigrama salta por los aires. Claro, los entrenadores lo tienen fácil. Cuando pierden un partido, con exclamar "Los jugadores no cumplieron mis órdenes", ya tienen justificada la derrota.
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