< Fútbol nuestro que estás en los campos más inauditos,
apreciado y muy venerado es tu nombre,
venga a nosotros tu espíritu, tu predominio y tu soberanía deportiva,
hágase tu volundad, así en el cielo como a ras de césped,
danos hoy nuestro partido competitivo de cada día,
y perdona nuestros fallos comprendiendo nuestras debilidades,
como también nosotros excusamos a los menos hábiles,
no nos dejes caer en la tentación de buscar sólo el resultado,
y líbranos de ese mal, por que el fútbol debe jugarse bien... por encima de todo.>
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